Qué fecha, a qué hora, nace un amor es algo difícil de precisar. ¿Nace la primera vez que vemos a la persona amada? ¿O la primera vez que, al buscarle los ojos, nos encontramos correspondidos con la misma mirada, esa que no pretende ver sino entrar a través de las pupilas? ¿Nace la primera vez que pronunciamos su nombre como si invocáramos todo el universo? ¿Nace cuando se dice, cuando se reconoce? ¿Nace y crece tan poco a poco que no se sabe cuándo nació? Nadie registra, cronómetro en mano, la fecha de nacimiento de un amor. Pero todo el mundo necesita un número rodeado con rotulador rojo en el calendario.

sábado, 7 de abril de 2012

Duele...

Duele mucho que te digan que has cambiado y para mal, como no. Duele que te digan que  ya no eres la misma y que no vales para nada. Duele que te digan que has echo daño y que has jodido a alguien. Duele mucho. Yo no sé si todo eso es verdad, porque no he parado a pensar ninguna de esas cosas, ni voy a hacerlo, por el miedo de que todo eso sea verdad. Supongo que muchas veces te han dicho que no sirves para nada y que todo lo que haces lo haces mal. Creo que ninguna de las veces es verdad, porque si sirves para algo en la vida, sirves para hacer feliz a la gente o para otra cosa, no todo lo haces mal simplemente no has tenido un buen día :)
A veces nos pasamos con ciertas personas y nos pasamos de verdad y la hacemos daño sin darnos cuenta. Luego cuando nos queremos dar cuenta del daño que hemos hecho es demasiado tarde, y cuando pedimos perdón ya no sirve de nada.

No hay comentarios:

Publicar un comentario